Actividad física:
es cualquier movimiento corporal producido por la contracción de los músculos que resultan en un aumento sustancial del gasto de energía sobre una situación de descanso. La actividad física regular se asocia a menor riesgo de enfermedad cardiovascular, enfermedad coronaria, accidente cerebrovascular, mortalidad cardiovascular y total.
La actividad física no sólo aumenta el consumo de calorías sino también el metabolismo de base, que puede permanecer elevado después de 30 minutos de acabar una actividad física moderada. La tasa metabólica básica puede aumentar un 10 % durante 48 horas después de la actividad física. La actividad física moderada no aumenta el apetito, incluso lo reduce. Las investigaciones indican que la disminución del apetito después de la actividad física es mayor en individuos que son obesos, que en los que tienen un peso corporal asemejado al correcto.
Una reducción de calorías en la dieta junto con la actividad física puede producir una pérdida de grasa corporal del 98 %, mientras que si sólo se produce una reducción de calorías en la dieta se pierde un 25 % de masa corporal magra, es decir, músculo, y menos de un 75 % de la grasa.
Por el contrario, el abuso de la actividad física sin programa adecuado y supervisión puede ser destructivo. Desde el envejecimiento celular prematuro, desgaste emocional y físico, debilitamiento del sistema inmunológico. Para evitar el efecto contrario al esperado en cada caso es lo más conveniente acudir en busca de la elaboración de un programa adecuado a un entrenador personal. Y si fuera tu caso y tal necesidad que puedas tener, no dudes en ponerte en contacto conmigo, siempre mejor sin esperar a que pase más tiempo, en mi móvil 615 050 048 o en el fijo 91 531 07 42. Una vez haya analizado tu caso en particular, conociéndolo con detalle, te elaboraré un programa que mejor te convenga y supervisaré su aplicación y ejercicio correcto.
o llamar directamente a Aris en 615 050 048,
fijo 91 531 07 42 y consultarlo personalmente.